Fe y espiritualidad durante una crisis global
¿Qué es la espiritualidad? — La espiritualidad puede significar diferentes cosas para diferentes personas. Para algunos, es principalmente la participación de cierta religión organizada en la que creen; para otros no es necesario participar en una sola religión, sino en la unión de varias creencias que les permite acceder a lo Divino. Para otros, no es necesariamente una experiencia religiosa, que implica ponerse en contacto con su yo espiritual a través de oraciones, yoga, meditación, reflexión, etc.
Antes de la propagación del COVID-19, todos vivíamos la vida que elegimos. Y luego, nos impactaron de una manera que nadie podría haber predicho. Pero aquí estamos, en cuarentena, para que pronto podamos volver a vivir nuestra vida en paz.
Como estamos llamados a quedarnos en casa, es importante que usemos este tiempo para pensar en nuestras vidas y en cómo podemos hacer las cosas de manera diferente. Una mente ociosa puede provocar ansiedad y depresión. Es de suma importancia que hagamos algo que pueda aumentar nuestra energía espiritual. En otras palabras, concéntrate en dónde quiere Dios que sirvas, y ese será el trabajo más eficaz que puedas hacer ahora mismo.
Isaías 41:10 dice: “No temas, porque yo estoy contigo. No te desanimes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré. Lo sostendré con mi mano victoriosa.
Para el médico y autor Deepak Chopra, existen niveles de respuesta a la pandemia y cómo nos afecta física, mental y espiritualmente. La respuesta física es lo primero en el aislamiento y la distancia social. El segundo efecto, en nuestra psique, es todo lo que se experimenta personalmente. Él cree que la mejor práctica para la salud mental es el uso de técnicas de meditación y yoga, todos los días, no solo para la relajación, sino también para encontrar alegría y comodidad en nuestras vidas.
Nuestra fe y espiritualidad siempre tendrán momentos de cuestionamiento, prueba y crecimiento. Momentos como este que estamos viviendo, tienden a sacarlo todo.
¿Y cómo vamos a vivir este viaje?
Como terapeuta holístico, he respondido y encontrado respuestas a algunas preguntas de mis clientes y coachees.
Parece que la gente confía más en su fe y espiritualidad durante la pandemia. ¿Por qué piensas que esto está sucediendo?
Esto es cierto … cuando suceden cosas que están más allá de nuestro entendimiento o control, buscamos significados más profundos. Nos expandimos hacia realidades más allá de nosotros mismos cuando nos enfrentamos al hecho de que no siempre tenemos el control y ciertamente no somos el centro del universo (aunque somos una parte preciosa de él). Cada elección que hacemos por los valores más elevados de la vida, por la búsqueda de la verdad y la bondad durante este tiempo, nos está colocando más firmemente en nuestro camino de fe y espiritualidad.
Para aquellos que siguen las tradiciones de la fe, una pregunta común es:¿Por qué Dios está haciendo esto? Hay una respuesta?
Bueno, aquí está mi respuesta, nacida de mi fe, no que sea la verdad última, pero es mi verdad: Dios no está causando esto. Un virus fuera de control lo es. Nuestro mundo, aunque adorable y profundamente estimado, sigue siendo vulnerable, limitado e imperfecto. Dios nos da el regalo de la libertad y respeta nuestra libertad. Tomamos decisiones que no solo nos afectan a nosotros, sino también a los demás y a la comunidad terrestre. ¡No hay nada como la experiencia de esta pandemia para confirmar la profundidad y extensión de ese impacto! De hecho, nosotros y todo estamos interconectados. Nuestras tradiciones de fe también nos enseñan que Dios es todopoderoso, misericordioso, que puede hacer que todas las cosas se vuelvan hacia nuestro bien, si nos abrimos al bien; solo mire las señales positivas que nos rodean: Gente inesperada que ingresa contactar para preguntar si estamos bien; investigadores universitarios que intentan encontrar tratamientos y curas; profesionales de la salud que luchan por seguir cuidando a los demás; interacciones significativas con la familia, los amigos y el trabajo a través de plataformas digitales; creación de movimientos, grupos, eventos, donaciones a quienes más lo necesitan, etc.
La idea de comunidad se está redefiniendo ahora, es diferente para todos, pero ¿dónde ve el impacto positivo en eso?
Sobre todo, esta pandemia mundial nos invita a ampliar la idea de comunidad, ya que nos damos cuenta de que el mundo entero está en esto juntos. Estamos experimentando el dolor y la tristeza de la comunidad global. Nos damos cuenta de que el desarrollo del “yo” depende fundamentalmente del desarrollo del TODO. Lo que hago afecta a todos. Lo que hacen los demás me afecta a mí y al que amo. Se trata de considerar el sentido común y el bien común. Mire los sacrificios extremos que estamos haciendo ahora. ¿Porque estas haciendo eso? La respuesta en cada uno de nuestros corazones es mucho más que “porque es bueno para mí”. Espero que este sea un impacto positivo que nunca nos abandone y que podamos transmitir como nuestro legado a las generaciones posteriores.
Me gustaría practicar la fe y la espiritualidad de una manera significativa. ¿Cómo puedo descubrir nuevas oportunidades para hacer esto?
Las prácticas espirituales son individuales o comunitarias. Cada uno de nosotros necesita encontrar lo que queremos decir y estar abiertos al hecho de que puede ser algo muy diferente de lo que hicimos antes. Hay tantos recursos en línea, eventos comunitarios, meditar solo, estudiar y reflexionar sobre textos sagrados, asistir a misa, escuchar conciertos religiosos. Este es un buen momento para explorar, aprender y practicar.
A veces siento que estoy perdiendo la fe, tengo pensamientos negativos o un comportamiento no productivo. ¿Cómo evitarlo?
Cuando estamos conscientes, la vida se presenta con un camino a seguir. Nuestras propensiones primarias nos llaman al crecimiento evolutivo. Nunca terminan, pero continúan funcionando a niveles más profundos. Se necesita mucha confianza para saber que las luchas del pasado nos prepararon para esta próxima ola de crecimiento. La fe tiene que ver con una relación con lo Divino. Las relaciones se profundizan, crecen y evolucionan si son saludables. Evidentemente, hay retrocesos, pero la trayectoria general está por delante. En pocas palabras, no debemos tener miedo. Todo lo que estamos pasando nos presenta como una invitación. La “Casa de huéspedes” del poeta sufí Rumi nos enseña esto:
El ser humano es una casa de huéspedes.
Cada mañana un nuevo recién llegado.
Una alegría, una tristeza, una maldad
Cierta conciencia momentánea llega
Como un visitante inesperado.¡Dales la bienvenida y recíbelos a todos!
Incluso si fueran una muchedumbre de lamentos,
Que vacían tu casa con violencia
Aún así, trata a cada huésped con honor
Puede estar creándote el espacio
Para un nuevo deleiteAl pensamiento oscuro, a la vergüenza, a la malicia,
Recíbelos en la puerta riendo
E invítalos a entrar
Sé agradecido con quien quiera que venga
Porque cada uno ha sido enviado
Como un guía del más allá.
Estrategias espirituales para su cuarentena
1. Ore — Dios está escuchando. Creo firmemente que Él está con nosotros, tan cerca como lo estamos de nosotros mismos. Ore y espere una respuesta. Siempre llega.
2. Manténgase conectado: mantenerse conectado a través de programas de video, mensajes de texto o llamadas telefónicas son excelentes formas de mantener una relación con los demás. ¡Los seres humanos son sociales y necesitan esa conexión!
3. Ayuda: si no está en riesgo, vea qué necesitan sus vecinos. Todavía podemos practicar la solidaridad en la distancia social. La distancia social no significa el “fin del servicio”.
4. Sea agradecido: siempre hay algo por lo que estar agradecido. Nunca. La gratitud nos da perspectiva y nos hace ver cuán bendecidos somos.
5. Reduzca la velocidad — A menudo deseamos tener más tiempo para la contemplación. Hoy, tenemos más tiempo para contemplar y ver salir el sol o mirar un hermoso árbol a través de la ventana del patio trasero. Esas pequeñas cosas grandes que nos brindan una sensación de paz.
6. Participar en un trabajo significativo — Los monjes siempre lo han sabido: necesitamos un equilibrio entre el trabajo, la oración y el ocio en la vida. Invierte en tus ideas, tus proyectos, este es el momento de planificar antes de empezar de nuevo.
7. Amor — El amor es contagioso. San Ignacio dice que el amor se muestra en hechos, no solo en palabras. Pero también ayuda decirle a la gente que amamos. ¿Cómo quieres compartir el amor hoy?
Chequeo espiritual
De la misma manera que un examen físico beneficia a nuestro cuerpo, también es importante hacer un examen espiritual. Nuestras vidas espirituales necesitan ajustes para funcionar. Mientras que un examen físico ayuda a prevenir enfermedades, un examen espiritual nos permite tener una mejor calidad de vida, paz y armonía. Los síntomas de que algo anda mal pueden pasar desapercibidos y afectar negativamente nuestras vidas. Puedes hacer algo ahora para solucionarlo:
:: Haz un plan con tu experiencia espiritual y cúmplelo — En la película de ciencia ficción “Star Wars”, lo divino es retratado como una fuerza espiritual que une a todos. Uno de los mejores ejemplos de una persona espiritualmente sana es el Maestro Yoda. Es evidente que este personaje pasó algún tiempo creciendo en fuerza espiritual, en lugar de descuidar su vida espiritual. Vio el valor de la base religiosa de la fuerza y construyó su espiritualidad, haciéndose uno con la fuerza. Para ti, este compromiso puede parecer prometedor para hacer buenas obras o practicar tu divinidad a diario. Este no es un modelo único y es diferente de una persona a otra.
:: Empiece con algo y úselo como trampolín — Alguien me dijo una vez que todo el mundo tiene una capacidad ilimitada para el crecimiento espiritual. Por esa razón, la clave es comenzar con algo así como el trampolín hacia el crecimiento. Esto puede ser asistir a un retiro espiritual, participar en el estudio de un buen libro espiritual o en muchas otras actividades.
:: Establezca metas para el desarrollo espiritual — Sí, es importante evaluar dónde se encuentra ahora con su espiritualidad básica. Es posible que se haya comprometido a hacer esto en el pasado y no pudo continuar con el trabajo, pero nunca es demasiado tarde para comenzar de nuevo. Sin embargo, establecer una nueva meta lo llevará más lejos.
Mi opinión sobre la práctica del yoga en cuarentena y sus resultados
Yoga (en español ioga) (en sánscrito योग) es un concepto que se refiere a las disciplinas físicas tradicionales originarias de la India. La palabra está asociada con prácticas meditativas. Varios textos hindúes discuten aspectos del yoga, incluidos los Vedas, los Upanishads, el Bagavadguita, el Hatha Yoga Pradipika, el Shiva Samhita, el Mahabharata y varios Tantras. La palabra deriva de la raíz yuj, que significa controlar, unir o concentrar.
Los videos de la youtuber y profesora de yoga Adriene Mishler forman parte de mi rutina diaria de práctica desde hace algunos años. Hoy, casi 8 años después del lanzamiento de su canal, yo y alrededor de ocho millones de personas hemos usado sus videos. Mishler es conocido por su comportamiento alentador y sus videos siempre tienen un propósito filosófico y meditativo a seguir.
Practicar la no posesividad Uno de los diez fundamentos morales o filosóficos del yoga es aparigraha, que generalmente se traduce como no posesividad. Como es típico del yoga, primero encontramos esta práctica en nuestro tapete. Aprendemos muy rápidamente a medida que nuestra práctica se desarrolla, que no hay predicción de cómo sucederán las cosas mientras nos movemos y respiramos. Algunos días andamos sueltos. Algunos días somos rígidos. Algunos días avanzamos. Algunos días llegamos tarde.
Abandonar nuestro apego a los resultados Llega un día para todos los yoguis en que nos damos cuenta de que realmente no importa lo que hagamos o cómo nos sintamos en nuestra alfombra. Lo único que importa es que practiquemos. Liberamos nuestro apego a los logros, el progreso y los logros físicos en general. Esto es profundamente liberador. De hecho, este cambio suele ocurrir sin nuestra conciencia. Nos encontramos haciendo cosas en nuestra alfombra, sin apego a los resultados.
Dar sin esperar recibir. Damos porque podemos. Actuamos porque somos capaces. Compartimos porque somos bendecidos con abundancia. Decimos “sí” a alguien que lo necesita, porque es posible, ahora mismo, hacerlo.
Aquí está la clave: lo hacemos sin esperar nada a cambio.
¡Podemos ver todas estas enseñanzas en la actualidad!
La elección de practicar el desapego social es un ejemplo de pura generosidad. Estamos tomando una serie de decisiones, muchas de las cuales puede que no nos gusten mucho, para cuidar de personas que no conocemos o que nunca conoceremos.
Cada uno de nosotros está eligiendo hacer sacrificios por un bien mayor.
No lo hacemos porque tengamos miedo de contraer el virus. Hacemos esto porque la persona que pertenece a un grupo demográfico de alto riesgo puede mantenerse saludable porque no he tocado tantas manijas de puertas, botones de ascensores o cualquier otra cosa.
Es posible que nunca conozca los efectos de sus elecciones generosas, y eso es parte de la práctica.
Pensándolo bien, mientras observo al mundo que me rodea responder a esta crisis, mi mundo está lleno de gente buena, generosa y amorosa, y es con ellos a quienes quiero unirme.
Espero que puedan utilizar este momento como un instrumento para aprender y desarrollar su espiritualidad. Fe y felicidad en tu viaje. Namaste.
Ponte en contacto para programar una cita conmigo. Asistencia y orientación con valores reducidos y/o gratuitos mientras dure la cuarentena #EstoyAquiParaAyudar #SomosTodosUno
Kátia Brunetti — Terapeuta holística
